UN NUEVO MUNDO

…y durante largo tiempo hubo una época de vacas flacas.

El pueblo, desnutrido y sediento caminaba sin rumbo a través de las arenas de un desierto desolador. Hacía tiempo que había dejado de creer en los discursos y las promesas de los dirigentes en su etapa de la vida. 

Entonces habló uno de los líderes y dijo “yo os guiaré hasta una tierra verde y fértil, donde  el sol no se ponga nunca,  en la que nacen aguas cristalinas y crecen por doquier,  los árboles frutales”.

Pero como había ocurrido siempre, los líderes se olvidaban de las promesas y nada cambiaba para mejor.

Cierto día, el cielo se puso rojo y voló una nube blanca sobre sus cabezas, sonó un trueno horrísono al que siguió un relámpago cegador Después se hizo el silencio, y en ese momento sonó una voz que clamaba desde el cielo:

“Vosotros, que habéis llevado a mi pueblo  hasta la desgracia y la desesperación con mentiras continuadas, imponiendo leyes injustas y  aplicando desmesurados tributos, incumpliendo así las leyes que habíais jurado respetar y defender,  quedaréis desposeídos de vuestros títulos y de las representaciones que se os hubieran concedido, o a los que tuvierais derecho, se os privará de todas las prebendas y heredades y se os caerá la lengua y las manos para que, en lo sucesivo,  no podáis mentir ni robar".

Y entonces la voz se apagó, el cielo volviose azul, de nuevo, y la nube blanca desapareció entre los vítores del pueblo.

Cuando se hubieron apagado los ecos del clamor popular, se pudo escuchar  una voz en off que decía

-  Qué opinas Jesus, Hijo?

- Padre,  ! que no es suficiente con ese castigo, que hay que cambiar muchas cosas que se hicieron mal ¡. Es necesario hacer un off, cerrar el mundo actual y comenzar de nuevo la creación. Por experiencia sé que no es fácil dirigir y gobernar un pueblo, y ser justo y cumplir la ley en todas las ocasiones.

- Está bien hijo, tu viviste allí abajo durante 33 años y conoces mejor mejor los  problemas y conflictos cotidianos, y no se me ha olvidado todo lo que sufriste estoícamente durante esa etapa.

Ordenaremos a Pedro que cierre con llave la puerta del tiempo, llamaremos a consulta a su delegado en la tierra, el papa Francisco, creo que se llama así, para notificarle que resetearemos el mundo actual y crearemos un mundo nuevo y perfecto, en donde todos los seres nazcan, vivan y se reproduzcan en igualdad de condiciones, sin que nadie pueda sentirse superior a sus semejantes, o que prevalezca discriminación alguna por motivos de pensamiento, color, sexo o lugar de nacimiento.
No cometeremos el error anterior de precipitarnos y crearlo en solamente siete días. Si es preciso trabajaremos, sin descanso alguno, noche y día durante todas las semanas, los meses y los años que sean necesarios, hasta conseguir un mundo donde reine la paz y la armonía.

-Padre, no será todo eso demasiado trabajo para ti,?. También habría que suprimir el viejo dogma "te ganarás el pan con el sudor de tu frente", programar una vida sin fin y que el trabajo sea voluntario, en ningún caso ha de ser obligatorio.

-El trabajo seguirá siendo obligatorio en todos los casos, admito sancionar un convenio genealógico para descansar los lunes en lugar  del domingo, y así evitar el mal humor de todos ese primer día laborable de la semana. Confirmar los 30 días naturales de vacaciones más las fiestas oficiales, que publicaremos cuando hayamos acabado los trabajos de restauración.

-Así, en esas condiciones, preferiría que no me enviases de nuevo a realizar trabajos tan duros. No estoy dispuesto a pasar, por segunda vez, otros 33 años de sufrimientos, escarnios y desengaños, para terminar siendo crcificado junto a dos ladrones, sin conseguir el éxito de la misión que me habías encomendado. Y además, si el domingo pasa a ser lunes, ¿qué será del martes?.